lunes, 30 de agosto de 2010

El cuarto aniversario

Hoy ha sido mi primer día en la nueva oficina al sur de Frankfurt. Resulta duro tener que levantarse una hora más temprano todos los días y tener que depender del transporte público, pues antes me bastaba con dar un breve paseo y ya estaba en el trabajo. Supongo que en unos días me acabaré acostumbrando; sólo necesito más tiempo.

Según mi agenda, hoy también se cumplen cuatro años del día en que dejé de estar en Senogul, el grupo que co-fundé en verano de 2002, con lo que ya llevo tanto tiempo fuera del grupo como lo estuve dentro. Por aquel entonces la música era lo más importante para mí, pero se puede decir que tuve suerte: gracias a esa ruptura pude ponerme a trabajar en serio como traductor, venirme a Alemania y tener una familia. La alternativa habría sido quedarme en Asturias sufriendo la deriva del grupo hacia un tipo de música por el que no sentía interés, y así he podido tener la oportunidad de trabajar como traductor en series de videojuegos como Animal Crossing, Super Mario Galaxy (en un juego ya considerado "uno de los mejores de la historia") y Donkey Kong. Cuando una puerta se cierra, otra se abre.

Slash habla de su antiguo batería

De la autobiografía de Slash.

"La impresión que tenía yo era que a Axl no le caía bien Steven. Steven tenía un entusiasmo incontenible por la batería, por el rock y por la vida en general. Era hiperactivo y resultaba muy divertido estar con él. Pero también era brutalmente honesto y no se callaba sus opiniones con Axl ni con nadie del grupo. A menudo al dar su opinión le plantaba cara a Axl, y esa no era la forma en que Axl funcionaba. Steven no ponía filtros y decía exactamente lo que sentía, sin andarse con ningún rodeo. Duff y yo estábamos acostumbrados y no nos lo tomábamos totalmente en serio, así que nos era posible no hacerle caso. Pero Axl era más sensible que nosotros, algo que Duff y yo también entendíamos. Con Axl, yo no quería frenar las cosas en un ensayo o en el estudio plantándole cara con respecto a sus retrasos o lo que fuera. Pero Steven podía hacer un comentario o plantarle cara y eso nunca funcionaba. Pero no se podía calcular nada con Steven; lo que soltaba siempre era verdad; era un efecto secundario inocente de su personalidad. Por desgracia, al enfrentarse al nivel de sensibilidad hiperemocional de Axl, estoy seguro de que Steven ofendió a Axl demasiado a menudo sin darse cuenta siquiera. Puedo ver cómo Steven le dio a Axl sin querer donde más le dolía; pero dicho esto, no creo que Axl nunca reconociera con justicia lo que Steven aportó a Guns musicalmente, lo que era una dinámica que creo que le dolía a Steven. ¿Pero qué sé yo? Seguro que hay mucho más que eso, cosas de las que yo no puedo decir nada.

Axl dejó claro lo que pensaba de Steven ya en la preproducción de Appetite. Cuando estábamos a punto de terminar el disco, llegó la hora de discutir el reparto de créditos por la composición de las canciones. Hablamos de ello en el escenario de los Burbank Studios, y alguien propuso que como grupo tendríamos que repartir los royalties a partes iguales entre los cinco: un 20% para cada uno.

Axl frunció el ceño. "Ni de coña Steven se va a llevar un 20%, lo mismo que yo, ni hablar...", nos dijo. "Yo quiero el 25% y Steven se lleva el 15%. Es un batería. No contribuye a la composición de la misma forma que el resto de nosotros." Ese fue el compromiso que aceptamos: Axl se llevó el 25%; Izzy, Duff y yo el 20%; y Steven el 15%. Creo que a Steven esto le dejó marcado para siempre."