jueves, 25 de septiembre de 2008

The Suffering: un juegazo gratuito

La empresa Midway lleva tiempo hundiéndose. Han hecho unos cuantos juegos de temática interesante pero que al final acababan siempre defraudando en la ejecución. Es como si no supieran hacer juegos buenos (como mucho normalitos, como "Stranglehold"), pero hubo una excepción notable...

"The Suffering" fue un juego que en su día me sorprendió muy (des)agradablemente. Se trata de una especie de "survival horror" bien hecho, sin ratearte la munición y con momentos de terror auténticos... o mejor dicho, de sadismo y brutalidad muy conseguida y que le da un toque especial al juego. Porque terror no es ponerte delante un bicho gigante o rodearte con veinte zombis, sino ver cómo a un amigo le arrancan los brazos y las piernas...

Este excelente juego tuvo una continuación que no estuvo a la altura del original (intentaron explicar innecesariamente ciertas lagunas de la historia que no hacía falta rellenar), y su influencia se ve claramente en juegos posteriores como el logrado "Condemned", pero lo cierto es que no llegó a ser un gran éxito y seguramente muchos no habéis oído hablar de él hasta ahora. Sin embargo, ahora tenéis una oportunidad para disfrutarlo al fin, porque los desarrolladores del juego, Surreal Software (ahora embarcados en el ambicioso "This is Vegas"), han puesto "The Suffering" a disposición del público de forma totalmente gratuita.

domingo, 21 de septiembre de 2008

Sunshine (2007): Sunspotting

"Sunshine" es la segunda película de ciencia ficción del director de "Trainspotting". Tras su popular peli de zombis "28 días después", Boyle repite guionista y protagonista para mostrar una vez más al ser humano al borde de la extinción.

Boyle cree firmemente que el hombre es un lobo contra los de su especie, pero a diferencia de sus películas anteriores, aquí al fin se presenta una situación en la que cada personaje debe pensar por una vez en algo superior a sí mismo, capaz de justificar su sacrificio personal.

"Sunshine" tiene un desenlace agridulce que resulta casi "feliz" para lo que este director nos tiene acostumbrados. Los créditos finales, bajo fondo del estridente sonido "tecno" tan querido por el director, muestra una especie de "montage" retrospectivo de varias escenas de la película, pero en un gesto propio de Boyle, lo que vemos no son los momentos más felices de los personajes, sino la muerte de cada uno. Semejante gesto resulta incomprensible y hasta cínico, al restregarnos la cara contra las escenas más desagradables. Sin embargo, una vez vistas las muertes encadenadas una tras otra, pude comprobar que el final de cada personaje se corresponde exactamente con lo que cada uno temía o deseaba, con una (o dos) excepciones. Desde ese punto de vista, cada personaje ha podido completar su arco narrativo de una forma milimétrica. Por tanto, Boyle ha firmado aquí una película redonda.

Pero quitándome ya las gafas que me acreditan como merecedor de la atención de los vigilantes de culturetas, diré que esa reflexión no pertenece al visionado que hice junto a mi novia, porque en cuanto el nombre del director apareció abriendo los créditos finales, me obligó a apagar el DVD inmediatamente y empezó a comportarse de forma violenta. "Quita ya esa maldita música, me está destrozando los nervios". Se dirigió a la cocina y empezó a hacer la cena arrojando con rabia los alimentos junto a la encimera. "Odio las películas que me dejan con este mal rollo."

No creo que me atreva a ver ninguna otra película de Danny Boyle con ella.