domingo, 22 de junio de 2008

Evaluación: Clive Barker's Jericho

La falta de estilo como estilo. Así se podrían describir los juegos del estudio español Mercury Steam, antes Rebel Act Studios. El primero fue el extremadamente jugable pero poco jugado "Blade" (pese a la anticipación o "hype" que se intentó levantar desde la revista MicroManía), un juego gris con historia esquelética y música de librería pero con una adicción endiablada. Luego llegó "American McGee's Scrapland", clon robótico del GTA que estrenó un curioso modelo: la famosa "personality" norteamericana del videojuego ponía su nombre a un producto con el que no tenía nada que ver, pues el juego era 100% español. Esta falta absoluta de ego (o de confianza en sí misma) ha pasado a su último juego, "Clive Barker's Jericho", otro nuevo juego español vendido con el nombre de un famoso.

El juego otra vez resulta endiabladamente jugable, basado en el mecanismo de "mantén un miembro del grupo vivo para seguir" y permitiéndote usar distintos tipos de soldados con armas y poderes mágicos muy diferenciados. Estos poderes facilitan muchísimo las cosas si se usan correctamente y pese a su gran efectividad no desequilibran la dificultad del juego. En contra está que el juego tiene unos decorados feísimos y poco destacables con una geometría básica y repetitiva (aunque con toques que homenajean evidentemente el "Doom" original, en mi opinión uno de los referentes de este juego) y que no hay momentos realmente memorables, pero la experiencia vale la pena.

El juego es corto y me lo he acabado (en modo fácil) en un sólo día. El final resulta satisfactoriamente frustrante: después de que revienten ante tus ojos dos miembros de tu grupo que te han acompañado durante todo el juego (aunque por suerte son los dos cuyo funcionamiento no me gustaba nada y que no usaba salvo si el juego me forzaba a ello), tienes una batalla final y cuando vas a rematar al malo, irrumpe alguien que dice que va a hacer el trabajo por ti. Huyes de una explosión, y... fin. ¡Una cinemática final de diez segundos! Si es que ya podría aprender Hideo Kojima...

Y hablando de Hideo Kojima, la versión española de "Jericho" tiene como protagonista a Alfonso Vallés, al que se echa de menos desde que los insensatos de Konami decidieron dejar de localizar sus juegos a partir de MGS2 y nos tuvimos que tragar a un Solid Snake con voz yanqui y textos traducidos literalmente del japonés sin suavizar ni lo más mínimo esa forma de ver las cosas tan peculiar que tienen. Volviendo a Jericho, inicialmente tuve la sensación de que había muchas cosas traducidas "a pelo" del inglés (frases tópicas de los juegos de acción y cosas por el estilo) mezcladas con otras que están localizadas con expresiones 100% españolas y frases hechas que no tendrían sentido en inglés. El doblaje es de calidad constante media-alta, y digo "media" porque no hay ninguna otra voz tan reconocible como Vallés, aunque todos son profesionales (en "Blade" había momentos en que la voz del narrador Fernando Hernández era repentinamente sustituída por la de alguien que sonaba a programador o amigo del programador). Hay algunas frases que están interpretadas con un tono inadecuado para el momento en el que se dicen, pero supongo que eso se detectó demasiado tarde y creyeron que no merecía la pena gastar más para hacer unos "retakes" y arreglar el problema.

El juego está bien, pero no es tampoco de los que marcan época, y dura poco. Vale la pena jugarlo, pero no pagando el precio de novedad. Si acaban dándolo con la revista MicroManía, será una compra obligatoria.

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